Cayucos Un día ese ejército de ilegales, que ves en los telediarios mientras pones la mesa, la lavadora, el cd o el facebook, mejor dicho, esa multitud de hombres y mujeres que acumulan fronteras y cayucos en las manos vendrá para explicar en un idioma libre de llagas y visados a qué sabe la vida que no es vida, o cómo burlar la muerte es ya imposible. Y escucharás sus voces sin intermediarios, sin estadísticas, sin la solidaridad caduca de los cuervos blancos. No me preguntes cuándo. Simplemente escucha cómo cae el insoportable peso de la historia mal contada.
Marta Navarro García
Un poema con fuerza, sin tonterías. Recibe un abrazo y gracias de antemano.
la belleza de un poema que dice mucho en cada verso. Gracias, es para guardar y recordar. Saludos de A media voz.
el insoportable peso de la verdad mal contada, e insoportable…………….
que história tão verdadeira é a vida enganosa que vivem alguns repórteres que nos entram casa adentro, com mentiras que VENDEM revistas e dão estatísticas nojentas. que sorriem anunciando um desastre na via pública ou o abandono de uma criança ou animal.
El insoportable peso de la verdad mal contada.
Buen poema. Lo cierto es que el drama de cada una de estas pobres personas igual daría para varias tragedias griegas.
Miguel, Olga, Maria, Luis y Luanas,
a veces la historia mal contada crea estereotipos que los medios difunden y que luego no hay manera de reconciliar con el día a día. Nadie se va de su país por gusto, el desarraigo es algo durísimo y tiene todo mi respeto.
Kisses,