Recuerdos del país de nunca jamás.
Apellidos que delatan
el color de la memoria.
Rosas y lagartijas
entre tu piel y mi boca.
Y una vez más,
empieza la jornada.
Faltan dos guinness en el frigorífico, han desaparecido dos archivos, el cajón de la lencería está abierto y hay un mar de sujes y bragas dibujando un mapa en el pasillo y tú insistes en que no has sido. Venga YA!