Ni con GPS puedo entender a José Manuel Alonso, concejal de IU en Zaragoza. Salvar al Alcalde Belloch de la reprobación del fiasco y despilfarro del proyecto de navegabilidad del Ebro me desconcierta. Igual Alonso se ha comido una vaina extraterrestre, como en la peli de los «Ladrones de cuerpos». En cualquier caso, la vampirización del PSOE es matemática pura. El socio del anterior equipo de gobierno también se dejó engatusar con el caramelo envenenado de «Urbanismo». Ya sabía bien el PSOE lo que hacía, ya. Y CHA, no sé si inocente, torpe o pardilla total se metió en un laberinto del que era dificil salir, sobre todo si algunos medios de comunicación se empeñan en que no salgas. Da igual las siglas que acompañen en la aventura al PSOE del ayuntamiento de Zaragoza. El diente de vampiro lo hinca siempre. Los concejales deberían recordar más a menudo quiénes les votan y no jugar a cuántas fichas me das si te salvo. En especial la izquierda. Más que importante empieza a ser imprescindible.
Entre nómadas 
¿Qué has comido?
Besos,
Susy
Menudo panorama tenemos: el PSOE vampiro, el PP reduce lo mejor de su labor municipal, cuando la tuvo, a llenar la plaza del Pilar de maceteros (¿precursores de ExpoNabo?)… Qué panorama, madre….
Besos.
Yo creo que simplemente se les ha olvidado que los ciudadanos existimos. Se enredan en su propia nube de broncas internas, de un partido con otro, dentro de cada partido en varias facciones, ayva que así lograré más poder, quita que me haces sombra, y se olvidan olímpicamente de nosotros.
Hasta que les suena la alarma del móvil, cada cuatro años, recordándoles que tienen que hacerse unas fotos, y estrechar unas cuantas manos, y repartir unos cuantos besos, para que les vayamos a votar.
Han convertido la democracia en un teatro. Hatajo de irresponsables.
su cara da miedo, parece un drácula.
bicos,
Lo mismo escribes un poema delicadísimo como un análisis brillante y vampírico. Lo has descrito tal cual.
Un abrazo,
Marga Solandra
La verdad es que prefiero escribir sobre otra cosa, pero el metacrilato y la nocilla no los mezclo bien.
También hay vampiros emocionales, el día que charremos sobre ellos…
Una pena lo que sucede en el Ayto y lo que dice Alfredo e Inde es cierto, real como los colmillos sociales.
Marta